Publicaciones y ensayos

miércoles, 22 de diciembre de 2010

“La Eco-teología de la Liberación es la respuesta a la crisis que azota el mundo”


Brasil nos ha dejado un camino pujante a los movimientos sociales latinoamericanos. Sus pensadores nos han invitado a practicar una reflexión desde el Sur y desde abajo, han formulado toda una teología popular, una pedagogía propia y, fundamentalmente, el pueblo brasileño ha caminado largos años en esta práctica.

Vos acompañaste los primeros pasos de la Teología de la Liberación allá por los sesentas, ¿cuál es su vigencia en la actualidad?

Mientras pobres existan sigue vigente la teología de la liberación, en todos los países de América Latina hay teólogos, en Brasil hay bastantes, pero hemos añadido algo más. Porque la teología de la liberación nació escuchando el Grito del Oprimido, pero no solamente los oprimidos, es decir, los pobres, las mujeres, los indígenas, los afro latinoamericanos gritan. También grita la tierra, gritan los animales, gritan los bosques. Entonces dentro de la Opción por los Pobres se tiene que insertar el gran pobre que es la Tierra. Desde esta perspectiva nació una vigorosa eco-teología de la liberación que está difundiéndose y que es la respuesta a la crisis que acosa a todo el mundo.

¿Cuál es el lugar de los pueblos indígenas en esta Eco-teología?

Mira, yo tengo la convicción de que los pueblos originarios son portadores de una sabiduría ancestral, de una manera de relacionarse con la tierra no como un baúl de recursos, como algo muerto para ser explotado, sino la tierra como pachamama, como madre, donde nace la veneración, el respeto, el sentido comunitario de la convivencia, la producción no para el enriquecimiento sino para lo necesario, lo suficiente para todos. Entonces aquí hay valores que nosotros, la cultura dominante, hemos perdido y que los pueblos originarios nos recuerdan. Por ahí pasa el futuro de la humanidad. De ahí la importancia de darle centralidad a ellos, hacerlos hablar, escucharlos. Porque eso nos ayuda a encontrar un camino que tiene futuro.

Desde esta perspectiva ¿Qué escenarios nos depara el calentamiento global?

Yo creo que más grave que el calentamiento global es la escasez de agua potable. A más de mil millones de personas les falta el agua y hay dos mil millones que tienen agua contaminada. Y el calentamiento global va a hacer que muchas regiones tengan menos agua, va a generar erosión de los suelos y pérdida de cosechas y ahí entra la migración, el desplazamiento de millares y millares de personas, especialmente en África y en el sudeste asiático. Yo creo que esa situación será tan grave que obligará a una especie de Gobernanza Global, porque ningún país tiene la capacidad de resolver ese problema.

Son urgencias que tiene la humanidad y que debemos enfrentar colectivamente, ahí debemos presionar a los gobiernos para que encuentren soluciones globales desde una visión global y para que seamos hospitalarios. La hospitalidad es un deber y un derecho: cada uno tiene el derecho de ser acogido, nosotros el deber de acogerlos, porque somos habitantes de la misma casa común, hermanos y hermanas de la misma familia humana.

Hablamos ya de la Opción por los Pobres y de su actualización como Eco-teología, pero en Brasil también hemos visto florecer la Pedagogía del Oprimido a partir del pensamiento de Paulo Freire, una propuesta que ha tenido sus mayores frutos quizás en la experiencia educativa del Movimiento Sin Tierra…

Yo creo que para nosotros no hay otro camino que no sea ese que Paulo Freire nos enseñó y que en el fondo nos dice que nadie es pobre, que todos tienen una riqueza, porque todos, cada persona, piensa, produce valores y el pobre no es un pobre, es un oprimido, un hecho pobre, un empobrecido. Y que cuando los pobres, los empobrecidos, se reúnen crean una fuerza y se hacen sujetos de su liberación. Entonces un pobre mas un pobre no da dos pobres, sino que da un fuerte. Un pobre más un pobre reunidos hacen un movimiento de liberación. Entonces no es el Estado ni la Iglesia ni las personas de buena voluntad los que van a liberar a los pobres, son los pobres mismos cuando elaboran una conciencia, un proyecto y se unen. Nosotros entramos como aliados, por la puerta de atrás, apoyándolos, caminando juntos. Eso nos enseñó Freire, que ellos tienen una fuerza histórica que les permite cambiar la realidad y que nosotros, junto con ellos, aceleramos ese proceso.

La Eco-teología nos invita a luchar contra el agronegocio y los monocultivos desde una visión integral, recuperando la agricultura campesina. A su vez, la pedagogía del oprimido nos recuerda que un gobierno popular no sólo tiene que beneficiar a los sectores excluidos sino que debe asumirlos como los sujetos principales de su liberación. Sin embargo, durante los gobiernos de Lula en Brasil la reforma agraria se ha estancado, no se han frenado las plantaciones de soja para agrocombustibles -con su corolario de expulsión de campesinos y campesinas de sus tierras- y el MST ha planteado serios cuestionamientos a las políticas oficiales… ¿Cómo interpretar estas contradicciones y que esperar del gobierno de Dilma?

Yo creo que hay que partir del hecho de que tenemos democracias que se están solidificando, que se están fortaleciendo cada vez más, porque todos venimos de dictaduras militares. Entonces es importante que se mantenga esa libertad. Hay contradicciones que vienen del proyecto neoliberal que todavía está vigente. La mayoría de los gobiernos progresistas hacen políticas públicas a favor del pueblo, sea Hambre Cero, sea apoyando la agricultura familiar, sea fortaleciendo los grupos de base. Pero muchas veces tienen que conceder para mantener la estabilidad, muchas cosas que se critican pertenecen a la lógica del capital que es hegemónico y que impone su fuerza. Y especialmente el agronegocio que avanza sobre los bosques y deforesta. Entonces es importante organizarse. Por lo menos en Brasil hemos constatado que a medida que los grupos de base, los Sin Tierra y otros presionan al Estado, le obligan a establecer leyes, como por ejemplo la que mediante los satélites les obliga a establecer el control de la deforestación, que ha bajado mucho. Y hacer la crítica a los monocultivos porque son los que están mas en contra de los principios ecológicos, de la biodiversidad, de mantener los nutrientes de la tierra.

Entonces hay contradicciones, pero fundamentalmente importante es reconocer una apertura de una dimensión social donde los pobres están incluidos. En Brasil, una España entera que antes pasaba hambre, ya no pasa, es una revolución que nunca hemos conocido antes. Pero hay muchas cosas que hacer. Para que América Latina, que tiene una riqueza ecológica inmensa, pueda ser la mesa puesta para saciar el hambre de todo el mundo, tenemos que tener políticas internas a favor del pueblo pero abiertas a la humanidad que está sufriendo mucho por hambre y sed.

¿Cómo te imaginás Latinoamérica dentro de veinte años?

Yo no soy un mago ni un profeta pero yo me imagino que se irán consolidando cada vez más las democracias con tono participativo, es decir: no solamente elegimos representantes sino que las bases organizadas, los movimientos, presionan y discuten con los gobiernos –porque prácticamente no hay proyectos importantes que no tengan que ser discutidos con los movimientos sociales-, entonces la democracia será más participativa. Eso a mi juicio se va a fortalecer cada vez más, de ahí la importancia de multiplicar los movimientos sociales, mantener las redes de interdependencia porque eso crea una fuerza social que dado el momento puede transformarse en una fuerza política capaz de decidir elecciones y de imponer cambios profundos en las leyes para preservar mejor la naturaleza y para profundizar los beneficios a los pobres.

Rebelión ha publicado este artículo con el permiso de los autores mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.



domingo, 12 de diciembre de 2010

El Problema de la Tierra

Por: Adriano Muñoz

Reseña histórica

Para analizar con mucha profundidad este tema tenemos que remontarnos en la historia, ver un poco las formas de producción y de tenencia de las tierras de los guaraníes, ellos producían en forma colectiva y la tenencia de la tierra era comunitaria, pero no establecía ninguna forma de propiedad sobre ella, por lo tanto practicaban la agricultura eminentemente para la subsistencia de sus familias. Este modelo social productivo fue truncada por los colonizadores españoles, quienes empezaron a adueñarse de todos los medios de producción de nuestro país, esta situación ha empezado a crear fuertes contradicciones entre los colonizadores y los indígenas y criollos, y gracias a esta contradicción se revirtió esta situación con la toma del poder del Dr. Francia quien realizó una profunda transformación social, confiscando todas las tierras que estaban en manos de las iglesias y de los demás colonizadores y repartió a los verdaderos sujetos de la reforma agraria que son los pequeños agricultores. Todas estas políticas y acciones del Dr. Francia con fuerte apoyo popular colocó al Paraguay como el país más soberano y equitativo del continente y el mas avanzados en todos los aspectos así también en cuanto a las industrias, las mismas políticas siguieron los López. Por lo tanto esto creo mucha preocupación a la oligarquía local y extranjera, especialmente a los ingleses, pues por eso justamente diseñaron la guerra de la triple Alianza y en 1965 llevaron en pie para truncar nuestra revolución y para convertir otra vez nuestra patria en un país Con campesinos sin tierras y tierras sin campesinos hasta nuestro día

Este se va agravando a partir de la otra guerra que tuvimos la guerra del chaco, cuando los combatientes paraguayos después de que cesó la guerra volvieron a sus comunidades pero se encontraron con la sorpresa de que las tierras fueron reestructurado por el Estado para pasar a manos privados.

Las tierras públicas que quedaba, fueron repartidos a los altos jefes militares y civiles y a terratenientes brasileros durante la dictadura de Strossner. Con la apertura del neoliberalismo en Paraguay, se dio inicio a la revolución verde quien provocó la deforestación y explotación acelerado de los suelos y también de la mano de obra. A consecuencia de estos empezaron a organizarse los campesinos que posteriormente dará inicio a la Liga Agraria Cristiana LAC, cuyo principio fue la lucha por la tierra, en la actualidad todas las organizaciones campesinas que luchan por la tierra existente en Paraguay emanan de la LAC.

Con este modelo de producción se va agravando aun mas los problemas sociales porque además de los sin tierras se suman las contaminaciones, el desarraigo, el desempleo y muchos otros problemas sociales.

Con la apertura de la supuesta democracia, se democratizó algunas cosas pero no así la tenencia de la tierra, resultado de eso tenemos problemas sociales mas complejas , el desarraigo, la creación de cordones de miseria en las periferias de las ciudades, las desaparición de comunidades, la disminución de la biodiversidad, la utilización de semillas transgenicos y de agro tóxicos comprobado su nocividad para la salud y lo que aun es mas grave es que los que se producen no es para alimentar los 800 millones de hambrientos que hay en el mundo sino en gran porcentaje para alimentar los tanques de los vehículos de los países industrializados a traves del agro combustible.

La infelicidad de muchos crea la felicidad de una minoría en el Paraguay y eso debe ser revertido, a través de la repartición de los medios de producción y como principal la tierra, mientras no se haga eso, los compañeros campesinos no quedaran quieto y buscaran todas las formas de gozar de tal derecho, porque además de ser un derecho es una necesidad básica insustituible, que no se puede obviar. Pero jamás el Estado va solucionar este problema mientras esté sometido a los intereses del Capital.

Caracterización y definición de los campesinos Sin tierra
Dentro de la política de la clase dominante además de dejar desapercibido los problemas sociales como es la falta de tierra también trata de difamar, criminalizar o introducir conceptos acentuados con prejuicios para que la opinión publica viera con una visión de rechazo hacia los sin tierra. Hay ocasiones en que el Estado expropia los terrenos y entrega las tierras a los campesinos, olvidando de las otras necesidades como la salud, educación, crédito, asistencia técnica, alimentaciones durante los primeros meses de la mudanzas, dejando al asentamiento totalmente desprotegido en donde los campesinos no tiene otra opción que salir del asentamiento y rebuscarse nuevamente en otras actividades para la subsistencia de sus familias. Con estos resultados sale los burócratas súbditos de la oligarquía diciendo que los campesinos no quieren trabajar, provocando a la ciudadanía a tener una matriz de opinión diferente a lo que realmente acontece hacia los campesinos. Estas acciones es parte de la política de la oligarquía en donde se presta también los medios de comunicaciones, colocando en los títulos de los periódicos invasores en vez de Campesinos sin Tierra, pues nosotros llamamos invasores a los brasileros en especial que han invadido nuestro territorio, gracias a los gobiernos oligarcas, para desarrollar un modelo de producción contaminante, excluyente e insustentable.
Es importante realizar un autocrítica de las ocupaciones y asentamientos conquistadas y en proceso de lucha porque también contamos con mucha debilidades de la cual se atribuyen las instituciones estatales en vez ayudar a superar, algunas de las debilidades son: la falta de organización, la falta de planificación, lo cual es producto de la falta de conciencia de mucho de los campesinos sin tierra, sumando a los ataques de los terratenientes muchas llegan a frustrarse las conquistas ya adquiridas. Antes y durante la ocupación es necesaria la formación de la conciencia de los compañeros y compañeras

Campesino sin Tierra: es un grupo de ciudadanos que demandan cambios de un orden social injusto que los ha conducido al desarraigo y a la pérdida de su identidad como grupo social determinado, como consecuencia fundamentalmente de la aplicación de un modelo de desarrollo rural excluyente que no ha potenciado el mejoramiento de los espacios rurales en sus distintas dimensiones: económicas, sociales, culturales y políticas.

El Paraguay esta en los diez países mas desiguales en el mundo, en donde el 4,6% de la población obtiene el 84 % de la riqueza. Contamos con 300 mil familias sin tierra (datos CLACSO) Y esto va en aumento por el proyecto de sojización que se ha activado ya en 11 departamentos por la agricultura industrial implantada. Para nosotros, en el departamento de Concepción es importante la resistencia y la ofensiva que esta llevando los movimientos campesinos para evitar el avance de este proyecto, como sabemos, el departamento de concepción es el único departamento mas libre del monocultivo de la soja, por eso es considerado como el pulmón del país por las reservas de las biodiversidades que aun mantiene, gracias a la agricultura eminentemente familiar que se desarrolla, no es casualidad las persecuciones que se esta haciendo a los movimientos sociales en la zona norte, este obedece estrictamente a los intereses de los terratenientes que intentan por todos los medios avanzar en la deforestación para la siembra de la soja y a esto se presta los organismos jurídicas y de seguridad del Estado.


La legislación paraguaya que regula y garantiza la tenencia de la tierra y la propiedad en general esta expresado en varios cuerpos legales: Const. Nacional, Codigo Penal, Código Civil, la ley 622/60 de colonizaciones y urbanizaciones de hecho, 662/60 de la parcelación proporcional de las propiedades mayores y la 854/63 que crea el estatuto agrario. Las numerosas leyes existentes no esta exentas de contradicciones, lo que hace que su aplicación resulte en algunos casos parcial y en algunos casos impracticables, Las reformas y las modificaciones que se han hecho sobre algunas de ellas en los últimos años no necesariamente ofrecen un marco que favorezca un mayor nivel de bienestar a la población mas carenciada. En muchos aspectos ha significado un retroceso, como es en el caso del Art. 83 de la CN de 1967, que en la nueva CN de 1992 fue eliminado. Dicho art. textualmente expresaba; “ toda familia tiene derecho a un hogar asentado sobre tierra propia para lo cual se perfeccionaran las instituciones y se dictaran leyes mas convenientes a fin de generalizar la propiedad inmobiliaria urbana y rural y promover la construcción de viviendas económicas, cómodas e higiénicas, especialmente a trabajadores asalariados y campesinos” (CN 1967). Esta ley que garantizaba a todos los ciudadanos el derecho a una parcela propia, sea en el área rural urbana, y obligaba al Estado a cumplir con ese derecho, desaparece en la CN del 1992. esta solo habla del derecho a tener una vivienda digna- Art. 100- sin hacer ninguna mención a la tierra propia.

La modificación introducida tiene un propósito aparente: liberar al Estado de una mayor responsabilidad en lo que atañe a la cuestión de la tierra y dejar abierto un espacio para que el mercado sea en adelante el que medie en las transacciones inmobiliarias y los conflictos de tierras resultantes aparezcan como un problema de oferta y demanda. El Art. 107 de l CN garantiza la competencia en el mercado; si bien hace mención a la igualdad de oportunidades, quien participa en el mercado es aquel que tiene capacidad de demanda, de la cual carece precisamente el campesino. Otra traba legal introducida en la CN de 1992 es el previo pago de una justa indemnización acordado convencionalmente o por orden judicial de las tierras expropiadas – Art 109. Estos mecanismos legales incorporados en las leyes agrarias muestran una tendencia clara, la intervención cada vez más del mercado en la regulación de la tenencia de la tierra, restringiendo el rol del Estado en la materia.

La participación de los sectores empresariales, latifundistas poseedores de grandes extensiones de tierras, ha sido contundente en la constituyente de 1992 en contra posición a la débil presencia de representantes del sector campesino, lo cual ha llevado a la aprobación de artículos sumamente lesivos para el proceso de cambio en el sector rural. En el Art. 109 del CN. Expresa “se garantiza la propiedad privada, cuyo contenido y limites serán establecidos por la ley, atendiendo a su función económica y social, a fin de hacerla accesibles para todos. La propiedad privada es inviolable. Nadie puede ser privado de su propiedad sino en virtud de sentencia judicial, pero se admite la expropiación por causa de utilidad pública o de interés social, que será determinada en cada caso por la ley. Ésta garantizará el previo pago de una justa indemnización, establecida convencionalmente o por sentencia judicial, salvo los latifundios improductivos destinados a la reforma Agraria, conforme con el procedimiento para las expropiaciones a establecerse por ley. (CN 1992).

Esta norma consagrada en CN de 1992 fue un retroceso en comparación con la anterior, al incorporar el previo pago de una justa indemnización como una condición en las expropiaciones. La misma coarta la posibilidad de que el campesinado acceda a la tierra propia a través de la figura de la expropiación. Con esta ley lo que se hizo fue trasladar una potestad del Estado a la luz del derecho publico, casi a una operación de compra – venta de la propiedad. Contrasta con la naturaleza jurídica de la expropiación, según la cual ésta es un acto unilateral propio del Estado, que la impone centrado en consideraciones del orden económico, político y social, sobre la cual el afectado no discute porque el estado lo hace en función de la necesidad del desarrollo rural del país. Sin embargo la ley no permite eso; se resuelve la expropiación a favor de los ocupantes o peticionantes y se empieza negociar el precio, lo que puede llevar años. Mientras tanto se extiende la inseguridad y la precariedad de la posesión (halley Merlo, 2001). Esta nueva situación generada a partir de 1992 ha hecho que varias expropiaciones no se hayan podido legalizar por falta de acuerdo sobre el precio entre el propietario, los interesados y el Estado.

Aun con estas contradicciones y limitaciones, la CN 92 en su Art. 114 reconoce que la reforma agraria es uno de los factores fundamentales para lograr el bienestar rural y que para ello se adoptaran sistemas equitativos de distribución, propiedad y tenencia de la tierra, se fomentará la creación de las cooperativas agrícolas y otras asociaciones similares, se promoverá la producción, la industrialización y la racionalización del mercado para el desarrollo integral del Agro. Este articulo junto con el 116, que habla sobre la eliminación progresiva del Latifundio y minifundio, son capítulos que permiten a los campesinos pugnar por una mas justa redistribución de la tierra.

La vigencia ininterrumpida del estatuto Agrario por casi cuatro décadas sin haber sufrido ninguna modificación o reforma es un indicador del poder y del control que ejerce la oligarquía terrateniente sobre las instituciones del Estado. Las otras leyes que regulan y garantizan la propiedad privada están contenidas en los Códigos Civil y Penal, siempre con la salvedad de que cumplan una función social y económica atribuida por la CN. El Código Civil establece en su Art. 1954 el derecho del propietario de usar, gozar y disponer de sus bienes y la facultad legitima de repeler la usurpación de los mismos y de recuperarlos. El código Penal, por su parte, establece las penas privativas de libertad para los que cometieren actos de atropellos a la propiedad de terceros, y cuando dicho atropello se realiza conjuntamente con otros aumenta la pena. Inclusiva la tentativa de apropiación es castigada.

Como se puede observar, el campesino que carece de una parcela y que no tiene capacidad de demanda, que no cuenta con la capacidad económica de participar en el mercado de tierra, debe desafiar y vencer todas estas leyes para poder hacerse de una parcela propia. Esta situación lo coloca frente a una disyuntiva: permanecer quieto sin posibilidad de acceso a una parcela o disponerse a enfrentar el desafío, lo que conlleva necesariamente a la ocupación, al conflicto y esto a la vez a la intervención del Estado. La intervención del Estado es un paso importante y en la mayoría de los casos las ocupaciones de tierra se realizan a ese propósito, lograr que el Estado intervenga, pero con el riego de no haber ganado un aliado sino de haber sumado un enemigo, mas poderoso incluso que el propietario. En muchos casos de los conflictos de tierra, el Estado fue un aliado importante de los sin tierras y en otros casos poderoso enemigo. Esta estrategia de lograr la intervención del Estado se explica por el hecho de que el mercado esta fuera de las posibilidades de los campesinos y la única manera de lograr adjudicarse una parcela es a través del estado, con el aval del Estado.

Es importante comprender que aunque se promulgue las mejores leyes a favor del campesinado, esta situación no va cambiar si no existe voluntad política de parte de las instituciones del Estado. Este situación va seguir asediando a nuestras sociedades campesinas y no solo al campesinado sino también a la población urbana porque es un problema social que repercute de alguna o de otra forma en la población urbana.


Ocupaciones de tierra- ¿es un derecho o un delito?

El problema de tierra en el Paraguay plantea un dilema que va más allá de las disposiciones del derecho positivo que norman la relación de las personas y grupos en la sociedad y de la posesión de las cosas muebles e inmuebles. Para los legalistas, para quienes la convivencia en la sociedad debe estar regida por el cumplimiento irrestricto de la ley, esto no es discutible. Para los campesinos sin embargo, todo es discutible, primero porque la ley fue hecha para proteger los intereses de los poderosos, y segundo porque la vida, la dignidad de las personas, están por encima de la ley. Su cosmovisión respecto de la tierra es totalmente diferente a la de un capitalista. La tierra para los campesinos es parte de su modo de ser, es la vida, es la madre que da todo. Esta visión que tiene una raíz histórica profunda, sigue predominando en la conciencia de la gran mayoría de los campesinos. Incluso en las actuales ocupaciones algunos ocupantes aun apelan a la interpretación bíblica de que Dios creó la tierra para todos y que es la ley humana la que distribuye mal. Para reparar este mal se crean las organizaciones, se realizan las ocupaciones, porque la tierra es una de las soluciones al problema que existe en nuestro país (Argûello, 2001). De esto se deduce que la tierra para un campesino es el medio, es una herramienta sin la cual pierde su identidad, deja ser campesino: “para el campesino, la tierra es una fuente de vida, porque se obtiene para que los compañeros puedan sobrevivir, la educación de los hijos, la salud, la vestimenta, depende completamente de la tierra porque realmente unos de los grandes problemas que tiene el campesinado es la tierra, la única profesión que tiene los compañeros es el trabajar por la tierra. Digamos que el 99% del campesinado no tiene otra profesión porque no tiene posibilidad de estudiar otra profesión y por eso el trabajo por la tierra constituye una fuente de vida porque de allí debe obtener el sustento de la familia y por eso para nosotros es de mucha importancia.
Esta manera de entender y relacionarse con la tierra contrasta profundamente con la realidad que ha impuesto el capitalismo. Esta manera de ser también es un factor aglutinante en algunos casos y en otro es un factor de división. Sin el campesino sin tierra o pauperizado no internaliza la necesidad de la lucha por la tierra como un interés colectivo y como un reaseguro para su futuro y el de sus generaciones posteriores, entonces se deja llevar por la apatía, por el conformismo, es muy difícil que se convenza de la importancia de recuperar las tierras del poder de los terratenientes. En cambio cuando descubre que es bien que por el cual vale la pena luchar, la conciencia crece rápidamente. Este cambio de conciencia no se logra sin la organización, es aquí que entra a jugar un papel muy importante las organizaciones campesinas. Es a través de ella que el campesino va descubrir su interés y a percibir las relaciones sociales que se generan en torno a ella y que esas relaciones no responden a designios externos sino que son productos de las relaciones entre los hombres. Llegar a este nivel de conciencia es un avance que facilita la organización y la lucha por la tierra.

Conclusión
Si hacemos una mirada satelital a los departamentos de nuestro país percibimos que la zona mas verde o forestadas se encuentran en Concepción y parte de San Pedro, que significa zonas menos contaminadas, mas protegidas por la única circunstancia de que es una región en donde predomina la agricultura familiar campesina, así que la lucha por la tierra no es solamente una cuestión económica para el campesinado o no solamente es problema jurídico, es un problema político, ideológico e histórico, en donde se encuentra en disputa no solamente la tierra sino, la salud, la subsistencia, la defensa de la territorialidad y de la soberanía y por su puesto la defensa del ecosistema. Por eso deducimos que la inequidad, la desigualdad social son problemas que solamente serán solucionadas con profundas transformaciones políticas y sociales y estructurales.

Fuentes

v Reforma Agraria Confiscada – Mirta Barreto
v Los sin Tierra en el Paraguay – Conflictos agrarios y movimientos campesino –Quintín Riquelme
v http://www.oxfam.org/es/campaigns/agriculture/paraguay
v http://www.rebelion.org/hemeroteca/sociales/040523amorin.html



domingo, 5 de diciembre de 2010

La agroecología como respuesta a la globalización y mundialización capitalista

Por Adriano Muñoz

Nuestra sociedad en los últimos decenios ha presentado un fenómeno el cual ha sido de mucha conversación y análisis por los medios de comunicación y por la sociedad en general que es la globalización y mundialización. Esta relevancia que se ha dado a estos dos términos se debe a las grandes repercusiones económicas, sociales, culturales y ecológicas que se están dando los cuales cada vez mas se van agravando, especialmente para los sectores campesinos e indígenas teniendo en cuenta que además de ser vulnerables estos sectores, la mundialización recae en forma concreta y mas visible en estos espacios. Pero antes de entrar a analizar con mayor profundidad el tema creemos que es necesario clarificar o diferenciar estos dos términos: Globalización y Mundialización

Estos dos términos generalmente es considerados como sinónimos por muchos sociólogos y analistas sin embargo nosotros creemos que existe algunas diferencias lo cual detallamos a continuación: en primer lugar, por globalización entendemos como un fenómeno esencialmente económico que podría concretarse, en una primera aproximación, como el proceso de integración económica internacional que tiene como rasgos característicos la liberalización de los mercados, fundamentalmente, pero no sólo, el financiero y, en consecuencia, la profunda financiarización de la economía. Hasta tal punto esto es así que preferimos hablar de globalización financiera, término que designaría la transformación del sistema financiero internacional provocada por la supresión de las fronteras nacionales para los mercados de capitales, así como por la descompartimentación de los mercados financieros. Con independencia de ulteriores consideraciones. Sin embargo la mundialización compone además de todo lo que es la globalización mas los aspectos culturales e ideológicos, las tecnologías y los medios de comunicación de esa forma se crean una cultura global a imagen y semejanza del capitalismo.

Recordemos que la mundialización capitalista no es un hecho espontáneo y mucho menos natural dentro del proceso de la humanidad, su surgimiento obedece estrictamente al sistema capitalista y como nos habla István Mészáros que el sistema del capital se estuvo desplazando inexorablemente hacia la globalización desde su inicio. Ahora bien, es rigurosamente cierto que, desde esta perspectiva, la mundialización no designa nada nuevo, nada particular, nada específico. Desde sus orígenes la mundialización es la dimensión esencial del propio modo de producción capitalista. Ya en el Manifiesto Comunista, Marx y Engels avanzaban un diagnóstico de la mundialización capitalista. El modo de producción capitalista es mundial y por ende su naturaleza y sus principios obedecerá siempre de expandirse y abarcar todo el globo. Por eso tiene que demoler todo los obstáculos que se interpusiera en el camino de su pleno desenvolvimiento y tendrá que hacerlo hasta tanto el sistema sobre viva. (Mészáros)

Entrando a analizar en forma mas puntual la mundialización y globalización capitalista claramente explica que lo que hay es globalización del capital pero localización de la pobreza, mientras las empresas transnacionales se apodera de las riquezas y acumulan capital, por otro lado la gran mayoría de la población mundial se van empobreciendo cada vez más.

Los agentes o instituciones que impulsan y sostienen la mundialización y la globalización capitalista son bien identificados entres los cuales podemos citar: El FMI, la OMC, BM, las empresas multinacionales y bajo mando de estos queda los gobiernos neoliberales que cumplen estrictamente las recetas del imperialismo.

Dentro de la mundialización y globalización van desapareciendo los estados nacionales y hasta las empresas nacionales que no tienen la capacidad de competir con las empresas multinacionales por eso esta etapa del capitalismo es aún mas voraz y violento porque además de adueñarse de las fuerza trabajo del trabajador se adueñan y expropian también a los propietarios que no son competitivos y de esa forma se crea el monopolio. Según estudios las 100 empresas multinacionales mas grandes del mundo mas de 50 % pertenece a los Estados Unidos. La globalización es la imposición ideológica, política y económica de las grandes multinacionales, fundamentalmente estadounidenses (Noam Chomsky 2001)

Al principio colocábamos que el sector mas perjudicado es el sector indígena y campesino teniendo en cuenta que con la mundialización se rompe toda la estructura tradicional de producción y de explotación de la naturaleza pasando a ser la producción y la explotación de la naturaleza bajo meros principios de la acumulación del capital y monopolio. Ante esta situación las identidades campesinas se encuentra en jaque por dos motivos: uno, porque la globalización es inminente por la hegemonía que ejerce el capital sobre la sociedad a la cual el campesino e indígena es el sector que mas resiste pero de toda la resistencia que puedan tener son fuertemente infiltrados por los medios de comunicaciones masivas, por la educación sistemática, el propio mercado y otras estructuras del capitalismo que lo hacen depender de los paquetes tecnológicos que imponen las multinacionales y; otro, a partir de esta primera situación el campesino no tiene las condiciones económicas ni tecnológicas para competir dentro del mercado y pasa a ser excluidos y desplazados de su territorio y de su identidad.

La mundialización es la mercadización social, ambiental y cultural, todo se reduce a mercado y por su puesto la agricultura constituye uno de los elementos fundamentales para el mercado para mantener su hegemonía y expansión. Los procesos productivos dentro de la mundialización se reduce por completo a procesos de mercadeo, empieza desde la obtención de la tierra, luego la utilización de los insumos, que para producir en forma competitiva su utilización es imperativo; las tecnologías, que son las maquinarias producidas por los países capitalistamente desarrollados y al final la distribución de los alimentos, las materias primas deben ser exportadas por los multinacionales y al mismo tiempo el país tiene que importar los productos ya industrializados además de las tecnologías. Por consiguiente esta situación provoca como resultante: pobreza, dependencia, desplazamiento, contaminación y por su puesto cualquier soberanía nacional queda en las legislaciones y postulados en simple letras muertas.

La globalización en síntesis ha traído los siguientes cambios al mundo rural de América Latina:

1) El incremento de las exportaciones de la agricultura no tradicional que se ha constituido en el sector más dinámico de crecimiento del sector agrícola.

2) La pérdida de importancia de los cultivos de subsistencia producidos fundamentalmente por la agricultura familiar campesina. Esto ha posibilitado la dependencia no solo en los insumo sino también en el consumo de las familias.

3) El incremento del consumo interno de productos alimenticios elaborados por la agro-industria (aceites vegetales, pastas, arroz, pollos, cecinas, productos lácteos, frutas y vegetales) a menudo con alto contenido de materia prima importada.

4) Predominio de los agricultores capitalistas, caracterizado por el monocultivo, esto provoca una situación de campesinos sin tierras y tierras sin campesinos.

5) Cambios en la composición de la fuerza de trabajo rural. Los antiguos trabajadores fijos de las haciendas han sido substituidos por asalariados. Dentro de estos predominan los estacionales sobre los fijos. Se ha producido una feminización importante de la fuerza de trabajo y parte de esta fuerza de trabajo se ha urbanizado. A menudo esta fuerza de trabajo urbanizada depende de intermediarios o contratistas y no tiene una relación laboral estable con la empresa agrícola en que trabaja.

Problemas concretos que genera la mundialización del capital en el campo

Ø Exclusión socio-económica y discriminación basada en razones étnicas o de género.

Ø Carencia o acceso limitado a los servicios básicos (salud, educación, vivienda). La globalización es el reflejo del neoliberalismo y las característica principal de este es achicar el Estado y pasar los servicios públicos a manos privadas lo que genera aún mas desatención y abandono a estos sectores por que no cuentan con poder adquisitivo para ser atendidas por las empresas privadas.

Ø Nivel de ingreso por debajo de la canasta de bienes y servicios básicos, incluyendo alimentación. Se impone los paquetes tecnológicos, hay competencia en el mercado, sin embargo el campesinado no tiene la posibilidad de acceso a los niveles requeridos.

Pero la globalización, la mundialización son propios del capitalismo que por sus contradicciones y por la insustentabilidad social y ambiental conlleva a generar espacios de salidas y creatividades propios del pueblo, con esto queremos decir que la globalización y la mundialización del capital no es el fin de la historia y tan poco es una situación irreversible, en la medida que se va erradicando al capital vamos ir recuperando la naturaleza social humanizada.

Dentro de esas creatividades y salidas concretas no solo para los efectos de la mundialización sino también las causas, surge la agroecología que no podemos reducir a simple alternativas sino que tiene que ser masificado por una necesidad histórica y global para erradicar las causas y efectos de la mundialización y globalización capitalista.

Por tanto, la agroecología podemos definir como un modelo de producción basado bajo los principios ecológicos para la sustentabilidad social y ambiental que busca satisfacer las necesidades de las generaciones presentes sin comprometer la capacidad de las generaciones futuras, para satisfacer sus propias necesidades (Altieri). La agroecología ha surgido como un movimiento que representa un cambio de paradigma desde una agricultura convencional a una agricultura sustentable, en teoría y práctica (Callicott, 1988).

Desafíos de la agroecología ante la mundialización y globalización del capital desde las distintas dimensiones

A) Dimensión ecológica

La contaminación del agua, del suelo y del aire con los agrotóxicos y gases contaminantes, la desaparición de los bosques, la desertificación y la erosión de los suelos, la extinción de miles de especies de la fauna y la flora, son elementos mas que suficientes para repudiar a la agricultura empresarial capitalista, por tanto desde la dimensión ecológica la agroecología tiene un gran reto que es de revertir esta situación que inminentemente nos lleva a un suicidio colectivo. La Globalización trae impuesta las tecnologías (maquinarias, insumos químicos), biotecnología (transgénicos) que ocasiona un total desequilibrio del medio ambiente, mundializa los paquetes de la revolución verde, sin medir las catástrofe que ya está causando.

Como critica la modelo empresarial la agroecología busca a través de su enfoque la mínima alteración del ecosistema, reducir en las mínimas nuestras intervenciones para no alterar el equilibrio que hay en la naturaleza. Es la práctica basada en el respeto a la biodiversidad. Alimentar el suelo y la biodiversidad además de alimentar la humanidad, vivir con una forma armónica con el medio ambiente para que haya una sustentabilidad ecológica.

B) Dimensión Económica:

Los paquetes tecnológicos de la agricultura capitalista son imposiciones sistemáticas que el campesino es sometido y también a los consumidores a través del mercado lo cual hace depender en forma absoluta de las empresas multinacionales para obtener los insumos y maquinarias. Al tener estas dependencias los costos de producción son mas altos además de gastar más en energía fósil. Para el consumidor se estandariza los alimentos para un mayor dominio.

Para la agroecología se disminuye en lo máximo las dependencias en factores externas y especialmente del mercado. Utilización mas eficiente de los recursos energéticos. Al disminuir el uso de energía y las dependencias del mercado se abarata los costos de producción, además al dar mejor uso a los recursos como suelo, agua aumenta la productividad. En la agroecología el producto, la materia prima obtenido es un bien de uso sin embargo dentro de la agricultura industrial de por si es una mercancía.

C) Dimensión política

La agricultura de la revolución verde se ha hegemonizado y por tanto globalizado gracias a los gobiernos neoliberales que se han establecido en América Latina. Las instituciones del estado de nuestros países, excepto los países que han construido su independencia dentro del Socialismo del Siglo XXI, han dado toda la legalidad a las invasiones y saqueos que hacen las empresas multinacionales a nuestros territorios con el pretexto de hacer inversiones en el país para el desarrollo. Comprendiendo que la agroecología no es un enfoque ambientalista y tan poco se reduce a pura practicas o técnica de producción sino además de eso plantea profunda transformaciones estructurales que posibilita una sustentabilidad social, económica y ambiental. No se podrá masificar la agroecología mientras que los pueblos no logren ocupar el poder político dentro de los países.

La soberanía de los pueblos se sustenta en la medida en que estos puedan ser soberano en la producción, distribución y consumo de alimentos, la agroecología es una herramienta fundamental para la autodeterminación de los pueblos. Pero la soberanía no va venir por casualidad sino que dependerá del poder político que los pueblos van conquistando y asumiendo.

D) Dimensión Social

La pobreza, los problemas de salud, la desnutrición, el desplazamiento, la exclusión son productos de la mundialización y globalización capitalista que al mismo tiempo crea una localización de la pobreza por la mala distribución de la riqueza y el mal uso de los mismos. Sin embargo la agroecología con sus estrategias y tácticas busca combatir la desigualdad social, la dependencia, el desarraigo. No se podrá masificar la agroecología mientras no haya una distribución equitativa de los medios de producción como la tierra teniendo en cuenta que la tierra es monopolizada por las grandes empresas multinacionales mientras que los sujetos históricos de la agricultura no cuentan con este medio de producción. Dentro de la dimensión social es preciso resaltar la distribución y el consumo por que la agroecología no solamente busca producir sanamente sin alterar el ecosistema sino también busca una buena distribución de los productos para que no haya especulaciones hasta llegar al consumidor y por eso se busca fortalecer los mercado locales para que haya una relación directo entre productor y consumidor.

E) Dimensión Cultural

La globalización capitalista promueve una cultura única que responde directamente al mercado, al consumo y a los intereses estrictamente del capital. Padronizan los pensamientos, las culturas y pretende hacer desaparecer todas las culturas autóctonas y originarias. La agroecología busca recuperar y fortalecer la diversidad cultural de los pueblos.

Para lograr que las fincas, las parcelas sean agroecológicas, las mentes, las ideas, las conciencias tienen que ser también Agroecológica. Se debe construir una cultura ecológica, por tanto la salud ecológica no es la única meta de la agroecología. En realidad, la sustentabilidad no es posible sin preservar la diversidad cultural que nutre a las agriculturas locales. Una producción estable solo se puede llevar a cabo dentro del contexto de una organización social que proteja la integridad de los recursos naturales y que asegure la interacción armónica de los seres humanos, el agroecosistema y el medio ambiente.

Además de descolonizar nuestro territorio de los multinacionales debemos también descolonizar nuestro pensamiento del capitalismo, del consumismo, de las recetas, inclusive del cartesianismo. La agroecología promueve sujetos colectivos independientes pero integrales.

Concluyendo, podemos decir que la agroecología va más allá de una mirada unidimensional de los agroecosistemas: de su genética, agronomía, edafología, etc. Esta abarca un entendimiento de los niveles ecológicos y sociales. Por tanto además de producir sanamente la agroecología constituye una bandera de lucha para los pueblos campesinas e indígenas y es la única respuesta concreta ante la globalización y mundialización capitalista.

El único aspecto positivo de la mundialización y globalización capitalista que tenemos que considerar es la posibilidad y mas que una posibilidad es un hecho de unificar a todos los movimientos anticapitalistas del mundo en una lucha común hacia un enemigo común y global que es el capitalismo y esto ya se ha demostrado en los grandes foros internacionales como el Foro Social Mundial, Cumbre de los pueblos y además ha arrojado movimientos y organizaciones internacionales de gran envergadura como es la Vía Campesina Internacional.

Globalicemos la lucha

Globalicemos la Esperanza!!!

Fuentes:

Fernando Soler - Departament de Filosofia Universitat de València http://www.w3.org/TR/REC-html40" xmlns

Revista de la Academia /Nº 12/ Primavera 2007 / Pp 157-172 – Raúl Zarzuri

LOS DESAFIOS ACTUALES DE LAS ORGANIZACIONES CAMPESINAS - Víctor M. Quintana

Denis REQUIER-DESJARDINS C3ED, Universidad de Versalles http://www.cybercable.tm.fr/~jarmah/public_html/DENIS4.htm#2

El desafío y la carga del tiempo histórico – István Mészáros

Desigualdad, subdesarrollo y pobreza en la actual globalización ultraliberal

Dr. Anastasio Ovejero Bernal.